1. ¿Qué es la educación especial?
En un sentido amplio, la educación especial es aquella destinada a alumnos con necesidades educativas especiales, ya sea por sobredotación intelectual o bien por discapacidades psíquicas, físicas o sensoriales. Este tipo de educación comprende todas las actuaciones enfocadas a compensar dichas necesidades, en centros ordinarios o en centros específicos.
López Melero, Catedrático de Didáctica y Organización Escolar de la Universidad de Málaga (España), afirma que la educación especial es la disciplina del sistema de comunicación intencional que tiene lugar en una institución (proceso de enseñanza-aprendizaje) para desarrollar al máximo las posibilidades intelectuales y afectivo-sociales del niño de forma cognitiva, social y culturalmente diferente.
Así pues, entendemos la educación especial como un servicio de apoyo a la educación general que estudia los procesos de enseñanza-aprendizaje, y que se define por los apoyos especiales y necesarios, nunca por las limitaciones del alumno, y siempre con la finalidad de lograr el máximo desarrollo personal y social de las personas con necesidades educativas especiales.
Tal y como hemos mencionado al inicio, este concepto es mucho más global y dinámico que épocas anteriores, ya que deja de dar importancia al trastorno en sí para centrarse en la interacción entre los factores –especialmente educativos- procedentes del sujeto y los procedentes del contexto.
2. ¿Quién es susceptible de recibir educación especial?
Los niños con discapacidades son elegibles para recibir servicios de educación especial y servicios relacionados cuando cumplen con la definición de un “niño con una discapacidad”. Esta definición está regulada por las leyes de cada país, por ejemplo la ley IDEA (Acta para la Educación de Individuos con Discapacidades) es la ley federal que autoriza educación especial para niños con discapacidades en los Estados Unidos.
3. ¿Cómo identificar si el niño necesita educación especial?
En ocasiones no es fácil distinguir si el alumno presenta cierta desventaja frente a otros niños por algún motivo relacionado con una discapacidad. Los padres pueden averiguarlo observando ciertos aspectos en su proceso de desarrollo y en su proceso escolar y cotidiano. Cada niño tiene su particular proceso de desarrollo, si bien hay algunas escalas que permiten darse una idea de lo que debería estar realizando en cada etapa, es necesario estar atentos a los procesos del niño. Si los padres observan que hay algunas conductas o situaciones en el desarrollo de sus hijos que no sean comunes es necesario referirlo a un profesional para que los oriente en lo que se debe hacer.
En el proceso escolar, si los padres reciben una llamada de atención desde la escuela acerca de la conducta de su hijo, deberán identificarlas para dirigirse al profesional psicopedagogo para que con su ayuda puedan cerciorarse de que lo que observan y pueda ser abordado de una manera más profesional.
4. ¿Cómo se regula la educación especial?
Los principios conceptuales se regulan en cada país de una manera determinada, a través de una legislación concreta mediante normas y reglas que regulan la actuación en esta materia.
En España, el Decreto de 23 de setiembre de 1965 se responsabilizaba de la Orientación de la Educación Especial al Patronato Nacional de Educación Especial, y no fue hasta la Ley del 14 de agosto de 1970 cuando en su artículo 49 se definió el objetivo de la Educación Especial: “Preparar mediante el tratamiento educativo a todos los deficientes e inadaptados para una incorporación a la vida social, tan plena como sea posible” ; y en el artículo 51 indicaba que “la educación de los deficientes e inadaptados, cuando la profundidad de las anomalías que padezcan lo hagan absolutamente necesario, se llevará en Centros Especiales, fomentándose el establecimiento de unidades de educación especial en Centros Ordinarios, para los deficientes leves”. Esta Ley fue un intento de aproximar la Educación Especial al sistema educativo, pero todavía se hablaba de la deficiencia del estudiante, y se mencionaba por primera vez a dos clases de deficientes, profundos y leves.
Después de un proceso y de la aprobación de diversas leyes, en la actualidad contamos con la Ley Orgánica de Educación (LOE) de 3 de mayo de 2006, dedica el Título II a la Equidad en la educación, cuyo capítulo I se dirige a alumnos con necesidad específica de apoyo educativo considerando dentro de este colectivo a: los alumnos con Necesidades Educativas Especiales, los alumnos con altas capacidades intelectuales, y los alumnos con integración tardía en el sistema educativo.
5. ¿Qué es la educación inclusiva?
Hemos mencionado varias veces el concepto de educación inclusiva, como la evolución en cierto sentido de la educación especial. Así pues, la educación inclusiva es un modelo educativo que busca atender las necesidades de aprendizaje de todos los niños, jóvenes y adultos prestando especial atención a aquellos que son vulnerables a la marginalidad y la exclusión social.
La educación inclusiva es considerada como un proceso que toma en cuenta y responde a las diversas necesidades asociadas a la discapacidad y al ambiente, pero no exclusivamente a ellas. Esto implica que las escuelas deben reconocer y responder a las diversas necesidades de los estudiantes sin distingo de raza, fe o condición social y cultural.
El proceso de evolución de la educación especial a la educación inclusiva merece un capítulo aparte, al cual le dedicaremos un post próximamente.
Comentarios
Publicar un comentario